Ruta clásica de gran ambiente de la cara norte de Risco Gordo, seguramente de las más asequibles de la zona oscura y curiosamente de los menos visitadas. De gran belleza en sus largos centrales y patio garantizado. A la sombra casi todo el día, es una opción muy recomendable para estas calurosas jornadas. Es una vía del 84, abierta por J. Colorado, M. Castilla y G. Martín. Al igual que sus vecinas está reequipada y razonablemente limpia. Llevar juego de friends simple y doble cuerda. El descenso una vez en la Cumbre del Pilar Norte, se realiza igual que el resto de vías del sector, dependiendo de donde hayamos dejado los macutos.
La ruta empieza escalando un zócalo vertical adosado a la cara norte, sistemas de fisuras con algún pasaje más apretado, bonito….
Realizamos un cresterío fácil para situarnos en una buena repisa coincidente con la primera reunión de la vía Javier Avellanos de la cara norte.
Un corto murete a derechas protegido con un clavo y una travesía posterior fácil nos deposita en la base del diedro característico de fiero aspecto y rematado por un techo.
Escalamos una lastra vertical en bavaresa y nos internamos en las cercanías del techo que desploma cada vez más, cuando nuestros brazos empiezan a sentir el efecto de la gravedad, nos internamos en una chimenea que alivia este problema gracias a la oposición del cuerpo contra ambos lados, remontamos y salimos a la izquierda a unas placas de agarrillos con mucho ambiente hasta la reunión, siempre con tendencia a la izquierda. Buenísimo ¡!
Un diedro vertical con buen canto sobre nuestras cabezas nos lleva a un pasaje protegido con un clavo, remontamos y con tendencia a la izquierda hasta unos enebros bajo unas fisuras que al remontar nos dejan en un gran nicho alfombrado con una bonita pradera que invita a sestear .... Muy bueno !!
Remontamos el filo a nuestra izquierda hasta la cumbre del pilar, donde terminan las otras vías de la cara norte, Guillermo Mateos, Pilar Norte y Javier Avellanos. Para salir a Risco Gordo, hacemos una gran travesía fácil hasta otro nicho, remontamos unos metros más verticales y otra gran repisa con la última reunión donde ya podemos desencordarnos y continuar en busca del collado.
En total 7 larguetes a la fresca con más de 200 metros para echar una jornada de escalada muy recomendable , un vía que como sus vecinas Mari Paz , Sr. Assas es una gran clásica en su género.
No os la perdáis.
Slds
