martes, 24 de enero de 2012

MAS ALLÁ DEL REDIL

VÍA EXCELSA - PIC DE ARTOUSTE



"Todo fenómeno sobre la tierra es un símbolo y todo símbolo es una puerta abierta, por la que el alma- si está preparada - puede entrar en la intimidad del mundo, donde tú y yo, el día y la noche, son todos uno. Delante de cada hombre, en más de una ocasión a lo largo de su existencia, aletea alguna vez la idea de que todas las cosas visibles son símbolos y de que, detrás de cada símbolo, moran el espíritu y la vida eterna. Pocos pasan libremente por esa puerta y renuncian a las hermosas apariencias para lograr la presentida efectividad de lo recóndito."

H.Hesse
“Iris”
ESPOLÓN SUPERSUR - RISCO DE LAS NIEVES - PEDRIZA

Esta luz es la capacidad racional del pensamiento crítico, penetrante, descubridor.
Hemos de preguntarnos dos cosas: si la conciencia puede, y cómo, ser liberadora; y además, si esta liberación es siempre conveniente.
No hay duda de que puede ser liberadora. Hay en la historia muchos ejemplos de que el hombre es capaz de liberarse de las cadenas del engaño, penetrando las raíces y las causas de los fenómenos. No me refiero solo a los grandes hombres, sino también a las muchas personas corrientes que, a veces por motivos desconocidos, rasgan el velo que les cubría los ojos y empiezan a ver.
La causa de su poder liberador puede residir en el aspecto de que la firmeza que tenga la posición del hombre en el mundo, dependerá de si es suficiente su percepción de la realidad.
Cuanto menos lo sea, tanto más desorientado estará, más inseguro y, en consecuencia más necesitado de ídolos ante los cuales inclinarse buscando seguridad. Cuanto mayor sea su percepción de la realidad, más independiente y libre será y en mayor medida podrá encontrar dentro de sí mismo su propio equilibrio. El hombre es como Anteo, que se cargaba de energía tocando la madre tierra, de modo que su enemigo solo pudo matarlo manteniéndolo levantado en el aire el tiempo suficiente.
La pregunta de si es conveniente que alguien se libere de su ceguera es más difícil de contestar. Suponiendo que la comprensión de sus conflictos lleve a una solución positiva y, por tanto a un aumento del bienestar, habrá pocas objeciones.
Pero, ¿y si el conflicto no puede resolverse ? ¿No saldrá mejor parado el hombre viviendo engañado, si una dolorosa verdad no le ayuda a liberarse en la realidad ?.

Parece que en ocasiones puede ser incluso necesario cierto engaño necesario, conocer la verdad tiene un efecto liberador; libera energía y despeja la mente. Como consecuencia, independiza, ayuda a encontrar el propio equilibrio dentro de sí mismo y vivifica.
Podrá darse uno cuenta de que no puede cambiar las cosas, pero habrá conseguido vivir y morir como un hombre, no como un borrego.

E. FROMM
“Del Tener al Ser”